Las pools (reservas) de liquidez, son una reserva de fondos colectivos que se utilizan para proveer liquidez a un mercado y que genera recompensas a cambio.
La liquidez es una característica importante de cualquier mercado y determina la compensación entre qué tan rápido puede ser vendido y a qué precio. Históricamente, el efectivo es conocido como el activo más líquido, ya que lo podemos “vender” para recibir bienes y servicios en el instante y sin pérdida de valor. Un activo tan líquido siempre tiene compradores y vendedores listos para intercambiarlo. En un mercado ilíquido, que tiene baja liquidez, un activo tendría que ser rebajado para lograr una venta rápida. Esto puede suceder porque el valor del activo sea incierto, o porque no exista un mercado considerable para tal activo.
Las entidades que aportan liquidez para un mercado son conocidos como market makers. Su servicio principal es facilitar la inmediatez de una transacción que tiene que procesarse, al absorber el pedido de compra o venta. Su presencia es de alta importancia para la salud del mercado ya que complementan el comportamiento de los especuladores. Los especuladores trabajan con base en comprar y conservar activos durante varios periodos de tiempo según sus predicciones de cómo cambiará el precio del activo en el futuro.
En DeFi, una aplicación de las pools de liquidez resulta ser Market Makers Automatizados (AMMs), que conservan pools de fondos para aportar liquidez al mercado y luego distribuyen recompensas a los que proveen esa liquidez. Los AMMs son el alternativo descentralizado a las instituciones grandes de market maker que cumplen la misma función en las finanzas tradicionales. Otras aplicaciones de las pools de liquidez en DeFi incluyen yield farming (cultivo de rendimiento), seguros descentralizados y gobernanza comunitaria.
